Promesas ...

Arrastré a Alice de la mano hacia el bosque, ya que yo también necesitaba cazar.
Además me serviriría para reflexionar acerca de algo que llevaba varios segundos rondandome en la cabeza.
Alice se puso inmediatamente a cazar cualquier presa, pero yo busqué una que me saciara completamente : un gran ciervo.
Cacé solo dos presas y esperé a Alice apoyado sobre una extensa roca, tratando de pensar con claridad, ya que quería hablar con ella.
Seguí dandole vueltas en mi cabeza mientras sostenía una pequeña piedra en mi mano, la tiré cuando escuché que ella se dirigía ya hacia aquí.
Alice vino a mi lado, ahora que ya me había relajado, notaba como su preocupación y angustia fluía también por mi interior.
Alice... necesito que me prometas algo. Es importante. No era el momento adecuado para hablar sobre promesas, ya que yo había roto ya unas cuantas, pero aún así, necesitaba que me lo prometiera.
Se sentó junto a mí, cada vez más nerviosa y preocupada, le cogí las manos y le influí tranquilidad, aunque no servía de nada cuando yo estaba todavía más nervioso.

Me senté a su lado dubitativa, no sabía de que se podía tratar pero estaba dispuesta a prometerle cualquier cosa.
Claro, lo que quieras. Susurré con sinceridad.
Jasper me miró fijamente, y yo hice lo mismo. Cada segundo que pasaba me hacía ponerme más nerviosa. ¿Qué podía querer? No tenía ni idea. ¿Y si era algo malo? No sabría que hacer.
Recordé lo mal que lo estaba pasando con lo de Bella y me preocupé aún más. ¿En que estaba pensando?
Solté una de sus manos y le acaricié la mejilla dulcemente, por un momento pensé que me temblaría la mano de los nervios, pero no era así, nosotros éramos demasiado perfectos para eso.
¿Qué pasa, Jasper? murmuré ansiosa. No podía esperar más, iba a explotar con todo lo sucedido en ese mismo día.

Respiré hondo aunque no me hiciese falta y comencé a explicarle lo que quería sin dejar de soltar una de sus manos.
Alice... yo no me puedo quedar más aquí después de lo que ha pasado. No quiero que vengas conmigo, sé que te gusta Forks y que no querrás abandonar a los demás. Por eso quiero que me prometas que vas a seguir con tu vida aquí, en la ciudad. No era cierto, yo la amaba y no podía separme de ella, pero no quería quitarle lo que nos había dado Carlisle, ni tampoco podía pedirle que abandonara a toda nuestra familia.No podía hacer eso .
Alice tembló, eso me asustó un segundo hasta que comprobé cuales eran sus sentimientos: Miedo y tristeza .
Tenía miedo. Ella tenía miedo de lo que yo acababa de decir. No quería verla así, pero tampoco quería obligarle a venir conmigo.
Tranquilízate Alice. Por favor. Me concentré lo suficiente para notar como ella se iva relajando cada vez más y más, hasta solo quedar un pequeño resquicio de temor en el fondo de su mente.
Ella me miraba, quizás sorprendida, pero me observaba atenta como si creyese que esto no era real, como si esto no fuese una despedida.
Como si esto ya no fuese lo bastante duro para mí, como para verla mucho más triste de lo que yo lo estaba .

Respiré hondo varias veces. Sentía como si me estubiese ahogando, no sabía que decir. ¿Se estaba despidiendo? ¿Es que ya no me amaba? Me atemoricé de nuevo ante ese pensamiento. Intenté relajarme pero no era nada fácil. ¿Pretendía que lo dejara ir?
¿Qué? Fue lo primero que logré murmurar. Cogí aire de nuevo y le miré fijamente.
Jasper no pienso quedarme aquí si tu no estás a mi lado. Él siguió mirándome como si no hubiese ninguna alternativa. Iré contigo. En el fondo albergaba la esperanza que tan solo fuesen unas vacaciones, que tarde o temprano regresaríamos todos juntos, como la familia que éramos. ¿Cómo se lo tomaría Ed? Aún se sentiría peor si nos íbamos. No. No podía pensar ahora en nada más, Jasper necesitaba irse, estaba dispuesto a marcharse el solo para no hacer sufrir a nadie, y yo no lo podía dejar marchar, yo debía ir con él.
Jasper, prometimos que estaríamos juntos hasta que la muerte nos separara, y dado a que eso no va a pasar, voy contigo.
Permanecí un instante en silencio, dejándole recapacitar. Si él me pedía que no fuera con él, tendría que quedarme y dejarle marchar aunque para mi fuese una condena eterna. Por lo menos ya no estaba nerviosa, el miedo a perderle lo había substituido. ¿Cómo sería una vida sin Jazz? Era bastante fácil de imaginar. Yo sola, con mis visiones, siguiendo cada paso que fuese a hacer, pero sin poder hacer nada. Era realmente deprimente...

Sabía que esto podía pasar, que no sería lo suficientemente fuerte para vivir sin mí, en realidad yo tampoco podía vivir si no era con ella.
Miré hacía el horizonte y suspiré, debatiendo en mi interior que hacer.
Alice te quiero, siempre te voy a querer, pero no estoy seguro de que sea buena idea. Miré sus ojos, aquellos ojos que no podría soportar no mirar a cada instante de mi eternidad.
Me derrumbé en mi interior pensando que no volveríamos a estar nunca juntos.
Te amo, no puedo alejarme de tí. Nunca lo voy hacer. La abracé mientras mis sentimientos cambiaban radicalmente, igual que los de ella.
Había sido una tonteria pensar en que no estaríamos juntos, no lo iva a pensar más en lo que me quedara de vida eterna.
Me separé de ella y le dí un suave beso en los labios, no volvería a asustarla con aquellas tonterías.

Llegamos a casa en pocos minutos. Teníamos que ser rápidos si no queríamos que nadie nos viese, por suerte Emmett y Rose no estaban cerca, Edward estaba en su cuarto meditando sobre lo que había ocurrido así que no prestaría atención a nuestros pensamientos. Carlisle estaba con Bella y Esme estaba con Tanya limpiando todo el escenario que habíamos montado en poco tiempo. Yo me concentré para que nadie nos pillara, y nos dirigimos a nuestra habitación. Ahí es donde decidimos dejar una nota, se merecían una despedida, alguna explicación.
Jasper se puso a hacer las maletas, aunque más bien buscaba una excusa para no encargarse de escribir la nota. Suspiré. Me dolía pensar que nos íbamos a alejar de ellos, pero albergaba la esperanza de que no sería por mucho tiempo.
Cogí uno de los envoltorios de los regalos de Bella y comencé a escribir:
<<Se que no es el mejor momento, pero no podíamos esperar. Nos hubiese
gustado despedirnos de vosotros pero Jasper necesita alejarse un tiempo
y no pienso dejarle solo. Edward, se que harás lo correcto, siempre lo has
hecho. Tanya nos alegramos de haberte tenido con nosotros aunque fuera
por poco tiempo, te devolveremos la visita. Emmett, Rose, cuidar de Edward
y de Bella, y Carlisle. Esme. Carlisle. Lo siento mucho, siento muchísimo que
nos vayamos así, espero que nos perdonéis. No tenemos claro
a donde vamos a ir, ya os llamremos. Os queremos. Un beso.>>
No tenía muy claro si era eso lo que debía decir pero no había tiempo para darle más vueltas. Oí como Jasper hablaba por teléfono, estaba buscando billetes de avión. ¿A dónde íbamos?
Dejé la nota sobre nuestra cama y le cogí de la mano, él me miraba con culpabilidad y yo le dediqué una sonrisa para tranquilizarle.
¿A dónde vamos?