Entrometida

Nos sentamos en las sillas de la cocina mientras Charlie no se enteraba de nada de nuestra pequeña discusión.
Sabía que Bianca no se interesaba nada por mí, solo miraba a Edward y eso me revolvía el estómago:
-Emm...esto...siete meses...creo.Susurré mientras intentaba no echarla de mi casa a patadas.

Cantidad de envíos : 335 Fecha de inscripción : 30/06/2009

Tarde o temprano tendría que respirar para poder hablar así que fui cogiendo aire poco a poco. Su olor me proporcionaba más sed de lo normal ya que se juntaba con el olor de Bella y era una mezcla explosiva.
Siete meses y seis días. Corregí sonriendo.
Bianca me miró impresionada.
Las cosas importantes no se me olvidan. Dije para arreglarlo y miré a Bella con dulzura.

Eres increible. Murmuré ruborizándome otra vez. Miré a Bella que me estaba echando miradas de odio todo el rato.
¿Como os conocisteis? ¿Que paso? Tenía mucha curiosidad por el tema ya que quería aprender lo máximo posible de él.

Intenté pensar en una forma de contarle parte de nuestra historia pero sin revelar el gran secreto.
-Nos conocimos en el instituto...mmm...mi primer día de clase.No le había dicho toda la verdad pero tampoco era mentira lo que le había contado.
Miré a Edward que me observaba con una sonrisa.

A Bella se le seguía dando tan mal mentir como antes así que insistí.
Va primita, dime la verdad. Mentir no es lo tuyo. Me reí con entusiasmo. ¿Que era lo que me ocultaba? Debía de ser realmente importante para mentir en una pregunta tan sencilla.
Permanecí en silencio esperando a que me dijese la verdad, y si no lo hacia, yo me encargaría de averiguarlo.

El corazón se me aceleró en cuanto escuché las palabras de Bianca. <<Oh, oh>>Pensé en mi inerior deseando no ser la excepción de Edward para que me pudiese escuchar.
Miré a Bianca sin saber que decirle.
-Eso fue lo que pasó, nos conocimos en el instituto.Aseguré mientras deseaba que no descubriera otra vez que le había vuelto a mentir.
Miré de nuevo a Edward, que ya no estaba tan relajado.

Me asomé a la ventana del hall, allí solo estaba el jefe de policia, así que proseguí y me dirigí hacia la ventana de la cocina, donde se encontraban Bella,Edward y....esa.
La verdad es que no era fea, pero...pero...era humana, eso és, Emmett nunca se fijaria en ella,solo se fijaria en...en su olor, eso es.
Vi como Edward miró hacía la ventana, debió de haber escuchado mis pensamientos.
De repente me vino a la mente, Edward se habia fijado en Bella, aun siendo humana y ¿Si Emmett era igual?
Esto cada vez estaba peor, antes de irme pensé para que lo oyera:
No le digas nada a Emmett.
Si hubiera podido ruborizarme este hubiera sido uno de esos momentos.

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Lo que Bella quiere decir es que nos vimos por primera vez en el Instituto pero que en realidad todo empezó en un restaurante de Port Angeles. Dije con seguridad.
Lo cierto es que por un momento pensé que se enteraría de todo.
Bella, a mi madre le encantaría que te quedaras a cenar. ¿Que te parece? Le pregunté intentando huir de las preguntas de Bianca. Estaba claro que era una chica muy inteligente y que no olvidaría esta conversación pero lo mejor era no volverla a sacar.
Era increible que Rosalie estuviera rondando por la casa. ¿Como podía pensar que a Emmett le gustara ella? La miré por la ventana con una sonrisa. Me hubiese gustado reirme pero no era el mejor momento.
Emmett la quería. Quería a Rose, no a una humana.

La pregunta de Edward me pilló desprevenida, pero reaccioné en cuanto me sonrió:
-Emm, sí, vale.Sonreí.
Miré a Bianca y sonreí de nuevo. Se despidió de nosotros y se fue a ver la televisión junto a Charlie.