La llegada...

Tema: La llegada... Lun 15 Feb 2010, 12:04

Estuvimos todo el rato susurrando sin que los demás se dieran cuenta de nada, cuando la gente se comenzó a despertar nos trajeron la comida. Yo puse una cara de desagrado tan sincera que la azafata me preguntó que si prefería otro plato, y yo negué con la cabeza. <<A quién me cenaría es a ella>> Pensé y luego me carcajeé por dentro.
El olor a sangre fresca era muy intenso en los aviones y era más difícil viajar, aunque el embriagador olor de Rose ayudaba bastante.
Al cabo de unas horas el avión comenzó a descender. Una señora salió corriendo a vomitar al baño. No se por que les disgustaba tanto, no era para tanto.
Aterrizamos con normalidad y bajamos lentamente del avión. Cogimos las maletas y nos dirigimos hacia la salida. Rose no había pensado en que no podríamos salir con el sol que hacía pero yo si.
Cogí una especie de burka que había conseguido, no destacaba nada por que todos se recubrían la cabeza y la cara con pañuelos para no quemarse.
Era muy cómico el aspecto que teníamos, por lo menos ahora la gente no se asustaba de nosotros ya que no nos veían apenas con tanta ropa encima. Me puse unas gafas de sol y comenzamos a buscar un taxi para llegar a algún pueblo cercano y conseguir cazar algo.

Tema: Re: La llegada... Lun 08 Mar 2010, 09:44

Cerré los ojos durante todo el viaje. Me relajaba estar tan cerca de él, me sentía segura y feliz.
Noté como el avión comenzaba a aterrizar, así que abrí los ojos poco a poco, como hubiera hecho una humana. No podía levantarme de golpe como si nada, no era muy normal.
Poco a poco me incorpore a mi asiento y intenté arreglarme el cabello, aunque seguramente no tendría mucho arreglo. Tampoco me importaba mucho en esos momentos, la verdad.
El sol se colaba por la ventanilla, y mientras el avión hacía las últimas maniobras para el aterrizaje me puse a pensar en el sol. El sol, luz, calor... África sin duda. Me avergoncé de no haber pensando en eso antes. No había estado mucho por la labor últimamente. Menos mal que Emmett si había pensando en eso... No me pareció la mejor idea del mundo pero que se le iba hacer... Me tendría que acostumbrar a ir mas tapada. Esto era África.
Al menos verlo a él me tranquilizaba, tampoco estaba mal, es mal lo consideraba hasta cómico.
Temí que el taxista se percatara de algo, pero esto aquí era normal claro.
Nada mas entrar a la recepción del hotel me quité el burka, y seguí con mi intento de arreglarme el pelo.
La gente nos miraba un poco extrañados. Temí que esta fuera una de esas zonas donde estaba tan mal visto que una mujer fuera así, pero al echar un vistazo por toda la recepción vi que todo estaba lleno de extranjeros, así que aquello que les fascinaba tanto era nuestra perfección.
Me encanta destacar nada más llegar a un sitio nuevo. Susurré de manera que solo lo escuchara Emmett, algo que le pareció divertido.
Recogimos la llave, era una de las tres suites principales. Al menos así tendríamos mas tranquilidad... e intimidad.
Estaba perfectamente equipada; Chimenea, Jaccuzi... Es perfecta. Murmuré con una de esas sonrisas que te salen sin más.
Dejé las maletas en el primer sitio que encontré y me senté en el borde de la cama.
Tenías razón cuando dijiste que si no veníamos nos arrepentiríamos. Admití.