La bienvenida

Tema: La bienvenida Vie 31 Jul 2009, 13:40

Bajé rápidamente y me dirigí hacia la cocina.
Ya bajan. Les advertí al ver que todo estaba preparado. Perfeccioné un par de cosas y me dirigí junto a Jasper. Le sonreí al ver su expresión. Parecía divertido ante lo que acababa de hacer y no prestaba mucha atención a la llegada de Bella. Tal vez esa fuera su táctica.
¿No tiene nada que objetar a lo de antes, Señor Cullen? Le susurré riéndome.

-Que va, aunque me la pienso guardar.Susurré con una mirada desafiante, luego me reí al ver su expresión.
Estuve atento a las escaleras, oí unos ruidos y supuse que eran ellos.
Un último vistazo a mi familia me bastó para comprobar que era yo el único que estaba inseguro, me relajé al notar la alegría de Alice y la felicidad de Esme.

Cantidad de envíos : 335 Fecha de inscripción : 30/06/2009

Bajamos las escaleras lentamente hasta llegar a la entrada de la cocina.
Bella, te estamos preparando algo italiano. Dijo Esme con esa dulce voz que siempre tenía.
Bella, esta es Esme. Mi madre a efectos prácticos. De reojo vi como Emmett saludaba con una sonrisa, y el cuchillo en la mano, a Bella. Puse los ojos en blanco. Jasper se mostraba más relajado que antes. Seguro que era gracias a Alice. Rosalie estaba seria y distante, como siempre. Y Carlisle mantenía esa gran sonrisa muy educada.

Entramos en la cocina, había un olor dulzón que rodeaba toda la estancia, como me había dicho Edward me estaban haciendo la cena:
-Buon giorno.Sonreí nunca había utilizado ese terminino con nadie.
-Nos has dado una escusa para estrenar la cocina.Exclamó Carlisle.
-Espero que tengas hambre.Susurró Esme.
Yo ya había cenado antes de venir, pero por las molestias que se hubiesen tomado no les diría nada.
-Humm...si, mucha.Mentí mientras miraba de reojo a Edward esperando que no les dijese nada.

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Eh... Miré a Bella y luego añadí: Ya ha comido.
Justo en ese momento vi como Rose soltó toda su rabia contra el plato de ensala que sujetaba. El plato se rompió y cayó dejándonos a todos en silencio. <<Como podía comportarse así. Era una amargada.>> pensé para mi mismo. Esme y Carlisle le echaron una mirada maliciosa llena de rabia. Miré a Alice y me concentré en sus pensamientos. <<Debería haber estado más atenta a Rose, y no solo en Jazz.>> No paraba de repetirse eso para si misma. Suspiré. Era de esperar que pasara esto. Emmett le puso la mano en el hombro para tranquilizarla. ¿Si la embistiese contra la pared, Bella se alteraría?

Me sobresalté cuando Rosalie rompió el plato, miré a Edward y me fijé en su tranquilidad, intenté imitarle:
-Perfecto.Murmuró Rosalie mientras se movía para no pisar los restos de lo que quedaba del plato.
-Es que como se...como se que vosotros no comeis.Epliqué mientras miraba a Edward de hito en hito.

-Molto bene, Bella.Sonreí y me puse al lado de Carlisle.
Al cabo de unos minutos decidí intervenir de nuevo:
-Por supuesto, muy atenta por tu parte.Murmuré mientras observaba a Rosalie con una mirada furibunda.
Entendía la preocupación de Rosalie pero por otro lado también trataba de comprender a Bella y sabía que le podría resultar demasiado difícil permanecer en una casa llena de vampiros.
Carlisle vino a mi lado, me rodeó con un brazo y me acarició el brazo.
Le dediqué una mirada entristecida y apenada por la situación, me siguió acariciando para tranquilizarme.

Perfecto, Bella ya habia cenado, despues de poner todo nuestro esmero en aprender a cocinar.Estupida humana.
Oh, perfecto.-exclamé con un claro gesto de odio mientras rompía el bol de ensalada en pequeños trozos de cristal.
Rose...- Vacilo Carlisle con un tono de severa paciencia.
Mire a Emmett esperando a que se pusiera de mi parte.
Y lo hizo como era de esperar.
Pero alguien lo interrumpió.
Pero aun así continué, partiendo de las ultimas palabras de Emm:
Si, sigamos fingiendo que esto no es peligroso para todos nosotros..- Aclaré expresando lo injusto que era que no nos dejaran hablar, cuando todos lo pensaban.
Esta vez no supe quien, pero alguien volvió a interrumpirme.
No, tiene que enterarse, toda la familia se vera implicada si esto acaba mal.Dije acabando con una mirada fulminante a Bella.

Todo el peso de su mirada llena de odio vino directa hacía mí. Evité mirarle a la cara y me pegué más a Edward. Sabía perfectamnete a lo que se refería Rosalie, pero evitaba pensar en la parte mala de todo este asunto:
-Mal en el sentido...en el sentido de que acabé siendo su comida.Musité mientras le miraba, una sonrisa se introdujo en cada uno de aquellos maravillosos rotros, mientras yo recapacitaba sobre lo que acababa de decir.
Se hizo un molesto silencio, o al menos para mí.
Edward decidió romperlo:
-Ven...Me dijo agarrándome de la mano..Te voy a enseñar el resto de la casa.
Dicho esto me despedí de su familia y nos dirigimos de nuevo a las escaleras, tras un minuto él volvió hablar...

Contemplé como se iban de la estancia y como subían las escaleras. Volví a mirar a Rosalie con una mirada de pena, miré al suelo donde miles de trozos de cristal y ensalada yacían entre sus pies:
-Rosalie, recoge eso inmediatamente.Murmuré mirando a sus pies mientras tiraba el paño que sostenía en mis manos hacia la pulcra encimera.
Emmet y Carlisle nos ayudaron a recoger la cocina mientra que Alice y Jasper se escaparon al jardín.
A ninguno nos importó que se fueran, ya que nosotros solos podiamos limpiar todo sin problemas...

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Miré a todos lentamente, leyendo sus pensamientos. Era irritante escuchar los de Rose, pero por otra parte los podía llegar a comprender, aunque, tarde o temprano, se daría cuenta de que Bella no era ningún error. ¿O si?
Me quedé pensativo y decidí desacerme de ese pensamiento así que me centré en enseñarle la casa a Bella.
Vamos. Le insistí mientras la sacaba de esa cocina de vampiros.