Antes de la fiesta de cumpleaños.

Me sorprendió mucho la visita de Tanya, pero me alegro un poco el dia...
Yo siempre me había llevado muy bien con ella, aunque no nos solíamos ver tan a menudo como queríamos.
Hoy era el cumpleaños de Bella, y realmente no era algo que me hiciera mucha ilusión...Pero después me iría con Emmett a África y eso cambiaba mucho las cosas.La apuesta había terminado, y todo volvía a ser como siempre...Mas o menos.
Enseguida sacie mi sed, aunque luego en el cumpleaños hubieran dos humanas no me preocupaba su sangre. Sabia que seria capaz de controlarme.
Me senté en un tronco de un árbol recientemente talado y esperé a que los demás acabaran mientras pensaba que llevarme a África...
Aquel camisón que compró Alice y que no estrene...Me iría realmente bien, sin duda.

Me acerqué sigilosamente hacia Rosalie, estaba tan sumida en sus pensamientos que ni se dio cuenta de que me acercaba a su espalda. Agarré su cintura con cuidado, y antes de que se diese la vuelta, besé su cuello con ternura. Noté como me dedicaba una gran sonrisa. Salté el tronco y me senté junto a ella. Ella no desvió la mirada de mis ojos, se la veía muy alegre últimamente.
¿A que se debía ese optimismo?
¿En que estabas pensando? Murmuré inquieto.
Escuché los pasos de Tanya a lo lejos que corría tras su presa, un poco más alejados estaban Esme&Carlisle haciendo exactamente lo mismo.
Hoy era el cumpleaños de Bella, esa idea me encantaba, por fin podríamos celebrar un cumpleaños normal, además estaríamos todos juntos, como una gran familia. Me alegraba de tener una excusa para poder hablar con Bianca y además, hacía mucho que no la veía.

En ti, en mi, en nosotros y en África. Murmuré sonriente sin dejar de mirar esos ojos dorados que hoy me encandilaban durante unos segundos mas.
Sin poder evitarlo volví a quedarme sumisa en mis pensamientos.
<<Aun no habíamos hecho las maletas...
Dentro de nada tendría que estar presente en el cumpleaños de Bella...
Me volvería a encontrar a Bianca...>>
Entonces deje esos pensamientos de lado de nuevo y observé como Emmett me volvía a mirar curioso. Lo siento. Es que estoy un poco nerviosa... Murmuré como disculpa mientras jugaba con un mechón de pelo, dedicándole una gran sonrisa.

Todo saldrá bien, ya lo verás. Murmuré para tranquilizarla. Lo cierto era que me preocupaba más su encuentro con Bianca que el cumpleaños de Bella. El cumpleaños era muy simple y no tenía por que pasar nada: Buena música, regalos, la enorme tarta para Bella... Todo saldría perfecto, bueno, perfecto si Bella no salía corriendo al ver todo lo que había montado Alice.
Solté una risita y suspiré.
Lo que más miedo me daba era que Rose tuviese unas palabritas con Bianca...
En ese momento oí unos pasos justo detrás nuestro, pero no me dio tiempo a reaccionar, cuando me di cuenta estaba rodando por el suelo al igual que Rose. Los dos miramos hacia arriba buscando el problema, entonces escuché la risa acompasada de Tanya.
Me incorporé de un salto y le di la mano a Rose para que se levantara.
Solté una sonrisa traviesa y miré los ojos divertidos de Tanya.
Muy gracioso... ya veremos cuando tu y yo hagamos un pulso. Ella frunció el ceño y me sacó la lengua y yo me carcajeé. Nadie me había ganado nunca en un pulso y nunca me ganarían.

Acabé de cazar un par de alces y cuando alcé la vista vi como Esme y Carlisle seguían cazando y como Rose y Emmet estaban charlando.
Siempre me habia llevado fenomenal con ellos por lo que se me ocurrió gastarles una broma.
Me acerqué por detrás de ellos y les empujé haciendolos caer al suelo rodando. Estaban tan concentrados en sus asuntos que ni me olleron.
Cuando frenaron ambos buscaron con la mirada a ver quien habia sido.
Emmet fue el primero en levantarse y se burlo de mi desafiándome a un pulso... sabia que nunca le ganaria por lo que le saqué la lengua y le dije: quien sabe... esta vez igual gano yo. Y comenzamos a reir.

¿Quieres comprobarlo? La desafié abiertamente. Los dos nos echamos a reír. Rose se intentó quitar la tierra y el polvo de su vestido. La cogí de la cintura y la acerqué un poco a mi, siempre estaba perfecta.
Si queréis podríamos ir volviendo, seguro que Alice agradecería vuestra ayuda... Murmuré en un susurro dejando claro que ellas serían las que ayudarían a Alice, y no yo. <<Podría hacer alguna puesta con Jasper...>> Pensé divertido y se me escapó una sonrisa.
Si, será mejor que volvamos ya... Dije, ahora con más entusiasmo.
¿Una carrera? Pregunté emocionado. Rose me miró y frunció el ceño, en cambio Tanya parecía encantada de la proposición.
Antes de decir nada más comencé a correr, sin darle tiempo a reaccionar, aunque no tardó nada en empezar...

Acepté el desafío: lo comprobaremos. Luegó Emmet propuso ir ya a casa para que Rose y yo ayudaramos a Alice con los preparativos... dejó claro que él no pensaba ayudar.
Ayude a Rose a quitarse la tierra del vestido.
Emmet sugirió una carrera para volver a casa y mientras que a Rose no le hizo mucha gracia, a mi me apetecía mucho. Antes de poder reaccionar Emmet ya habia comenzado a correr pero yo no tardé en hechar a correr tambien: eso es trampa! Le grité y acto seguido nos hechamos a reir. Te voy a ganar, le dije posicionándome a su lado en tono desafiante y burlón.